Pobreza y austeridad

 

 

Creo que voy a comenzar a plantearme los escritos de manera que puedan parecer distintas. De las cosas que hago, digo y pienso, prefiero recoger migajas; sé que no sirven para una alimentación reglada; pero semos así: pardos hasta en el pensar. Recortados en la expresión, para que así el pensamiento no sea el único del que escribe, sino la suma del que piensa.

 

  1. 340 días después del cierre de Urgencias en Aldeacentenera y Monago sigue son cortarse un dedo.
  2. Es hora de una siesta, por prescripción facultativa, claro
  3. Vale, estamos ya ahormados en valores y símbolos; quizá a la infancia -y a su futuro- le conviene esta otra bandera .http://goyotovar.es/?page_id=4173
  4. Bien creo que la inmediata revolución no tendrá olor a pólvora; seguro que que los aromas del Twitter causarán convulsiones más potentes.
  5. ¿De qué nos extrañamos? siempre ha sido así: unos pocos listos convencen, engañan o avasallan a muchos torpes. Quien observa es el que sufre
  6. Cuando se instaura la pobreza a través de la austeridad, se alimenta el vicio a través de la virtud. Es decir: su puta madre.
  7. La Historia sigue diciendo que la compraventa de empleos no sigue las normas de los inocentes, sino la de los culpables.
  8. Yo quiero un pedo aéreohttp://elpais.com/elpais/2012/10/18/gente/1350586307_140443.html …
  9. No sé quiénes me cansan más, si los Borjamaris o los que dicen que tienen en su casa un libro de Pablo Iglesias.
  10. ¿De qué nos extrañamos? siempre ha sido así: unos pocos listos convencen, engañan o avasallan a muchos torpes. Quien observa es el que sufre.

Goyo

25-oct-12

 

¿Qué fue de los cantautores?

 

 

Otra vez, bendecido el Quebranto Estatal por las finanzas, las aguas sucias arrastrarán de nuevo los derechos de una generación que los conquistó, aquellos que la siguiente abusó y aquellos que las presentes muestran sus manos incapaces para retener el grano y hacer volar la paja.

¿Cómo no vas a tener el tiempo merecido para percibir un futuro más aguerrido que el que nos presentan los financieros derechicados al extremo?.

Gracias, Luis Pastor por tus ánimos.

Vídeo de cabecera.

 

Goyo

07-sep-12

La patera

 

Perdón.

Esta noche, el cielo negro se ha dejado dibujar una luna como con dos finísimos cuernos; al poco, la oscuridad se ha completado.

Hemos cenado al aire que refresca los treinta y tantos grados de la tarde. La brisa árida al menos también es brisa. La conversación evade; pero más evade el pensamiento.

Perdón.

El ruido del agua domesticada me traslada al agua de la mar inacabable y al ansia de huida africana. Siento que sobre alguna patera nacen los murmullos que mezclan sabiamente recuerdos y anhelos. Los golpes de las olitas dulces empujan al sueño.

Esta noche no descanso en la cama, he decidido dormir a la cómoda intemperie. Dispongo las colchonetas del balancín que también hace de sofá y me arrullo con los imaginados golpecitos de agua que endulzan las sufridas maderas de la barca finita.

Perdón; pero así no tengo miedo. Imagino que el balanceo artificial debe ser parecido al de la fragilidad de la patera. Allí, el diverso grupo humano sacude sus miedos mezclando con cuentos africanos sueños europeos. El mar tiene su brisa hostigante y repleta de sales, y al decir del que piensan que sabe, indica que la barcaza sigue acercándose a la costa.

A ver si estos dioses inundan de suerte a los atrevidos, aunque yo esta noche no pueda conciliar el sueño.

 

Goyo

23-ago-12

Las medias

Ya oyeron ustedes alguna vez la insana sentencia de que “la medias no son buenas ni para las mujeres”, expresión que me duele por la cantidad de desconfianza que siembra y la enorme cosecha de desprecio que se recogen en los campos de la solidaridad y de la honestidad.

El último grito se ha oído. Las fuentes de donde se han obtenido las informaciones debemos entenderlas como fiables y, salvo rectificación o aclaración que se ofrezca, ni los patronos, ni los obreros se han dedicado a desmentirlas o a matizarlas. Ya el año pasado ocurrió situación pareja y fuimos capaces de tomarnos las uvas en espera de un Año Nuevo y Feliz; acabamos de superar la mitad del tiempo y no parece que la otra mitad sirva para construir una media ilusionante.

Basta de florituras: en referencias al año 2011, los empresarios declararon haber ganado anualmente, de media, 8.275 euros y los trabajadores, declararon haber ganado una media de 19.359 euros. Este es un país diferente a los diferentes países; o la media de los patronos son cucos o la media de los obreros protestan sin sentirse solidarios con los promotores sociales que son los verdaderos motores del desarrollo económico: los empresarios.

Las conclusiones que pueden derivarse ineludiblemente de esta situación declarativa, son abundantes. Yo no voy a resaltar todas las que se me vienen a la mente porque si usted ha sido capaz de leer hasta aquí, seguro que será capaz de descubrir escalofriantes silogismos.

No me parece correcto que -de media- un obrero sumido en la tristeza de la crisis gane al año más de dos veces más de lo que dice ganar -de media- un empresario; a no ser que, el conjunto de la masa obrera hispana se haya dedicado a tirarse el pisto mintiendo descaradamente. Ya sabemos que otra de las desgracias de los pobres radica en su incorregible capacidad de hacer el gilipollas.

Porque Hacienda somos –de media- todos, deberemos percatarnos que a la luz de la oscuridad de estos datos, poca claridad arroja sobre la economía oculta y la negrura empresarial.

Hacienda ya no es la patria contable que recoge impuestos y distribuye cohesión social, más parece el mentidero sagrado de los académicos e ingenieros de las medias.

Trabajo que quieren darle al señor Montoro.

Goyo

16-ago-12

 

 

Ecologías de Andrea Fernández Maneiro

 

 

 

Hoy comparto en mi blog un hermoso poema verde de mi amiga gallega Andrea Fernández Maneiro; pero yo creo que sale más bonito allí donde lo he copiado.

 

Cuando los árboles puedan votar
todos los políticos serán ecologistas,
los leñadores abandonarán las armas
y quizá alguna tribu sin sufragio conserve sus tierras.

Cuando los árboles voten
los fumadores apagarán sus colillas,
los políticos tendrán ética y estética
y quizá alguna planta invasora retorne de su emigración.

Cuando los árboles emitan su voto
confiaré en los ecologistas de verdad
en los políticos con ética,
en las plantas invasoras,
en los leñadores;
porque será entonces
cuando las tribus silenciosas tendrán voto
para mudar el mundo, ponerlo paras arriba
y disfrutar de la hierba húmeda del universo.

Pero, mientras esto no pase,
soñar que los árboles votan
es una locura que reforesta,
un relámpago hecho alumbrado público,
un espasmo convertido en energía;
es la esperanza renovable,
el reciclaje del alma;
es al fin, un jardín del edén,
escarbado en el asfalto ,
una urna convertida en una maceta
de metacrilato demócrata,
pozo de los deseos moderno,
donde dejar el voto del futuro deseado.
(30/07/2012)

 

 

Saludos a todo el personal sensible.

Goyo

07-ago-12

Canción del verano

 

De agosto fue el día tercero
Noche de la luna llena,
Mojé pluma en el tintero
Para contarles la pena.

Para anunciar el descanso
Se convocó al periodismo
Que como cordero manso
Resistió frente al abismo.

En esto llegó Mariano
Y se sacó de la manga
La canción de este verano
con pandereta y charanga

Feliz verano,… el que pueda,
y el que no pueda, resista
que quien resista esta rueda
se hace el dueño de la pista.

De todas las vacaciones
Que produce este verano,
Muy diversas soluciones
Nos recomienda Mariano:

El que pueda, que se joda;
Que sin vacación se queda
Que ya se ha puesto de moda:
que se joda el que no pueda.

El que pueda, que se joda.
Que si te duele una muela
Y no puedes ir de boda,
Que se joda el que no pueda.

El que pueda, que se joda
Que aunque tengas buen currelo
Se está poniendo de moda
Que el sueldo esté por el suelo.

Que sin vacación nos queda
Tenedlo muy bien presente
Que jodiéndose el que pueda,
Nos jodemos toa la gente.

Goyo
04-ago-2012

Hacia el Estado del Malestar

 

A mí siempre me gustó definir al Estado del Bienestar como aquel que provoca malestar en los poderosos. Hasta el día de hoy, no he encontrado mejor definición y, dadas las reiteradas muestras de desprecio y desprestigio que los poderosos deciden y ejecutan contra los desfavorecido y débiles que, hasta hace bien poco, formaban parte de una sociedad que les repletaba de atenciones y cuidados.

Este humanismo, como muchos otros humanismos, lleva consigo un incontrolable nivel de abusos de la gente cuca que se oculta tras la maraña de generosidad social; y eso cabrea a los pudientes, que se sienten injustamente protagonistas porque las riquezas que ellos generan se dispensan entre los mediocres. Tal es su modo de entender.

Con aderezar convenientemente este truco trilero, es bien creíble por parte de algún sector social que, por ejemplo, una sociedad puede mantener sus acostumbrados servicios básicos con menos impuestos, lo que favorecerá más empleos. Así los cucos no dudan en atender a las invitaciones pues si desean trabajar, tendrán ofertas; como si desean evadir a la Hacienda de Todos, podrá ser contemplado como viable, soportable, incluso justificable. A la moderna expresión: sostenible.

Implantados los calzos, las hormas y los achiques, al mundo mediocre nos salen ampollas diversas: quien no tiene un pariente mayor desatendido, tiene otro menor sufriendo impensables restricciones escolares, otro mediano que no sabe ya para qué sirve estudiar y otro grupo compacto de coetáneos entre los que difícilmente se identifican de forma voluntaria a los subieron al poder de un cambio verdaderamente radical: se hace con fruición y ansias lo que se anatematizaba hace menos de un año.

Ahora los poderosos tienen todo su bienestar, sumado al que teníamos nosotros antes. Quizá el slogan «súmate al cambio» significaba ya eso. No es otra cosa la Sociedad del Malestar que tan brillantemente les hemos puesto en bandeja.

De cómo se quiebra esta falaz delegación no es tarea de gentes mediocres.

Goyo

01-ago-2010

 

 

 

 

 

Historia de la calle para salir a la calle.

 

En un principio solo habría una casa, que como no existía entonces registro de la propiedad intelectual, los inmediatos pudieron imitar su construcción sin necesidad de estudio arquitectónico o urbanístico. Allí fue donde pudo nacer el primer urbanismo y la primera agresión medioambiental; pues la construcción de una casa es artificio que desequilibra profundamente la naturaleza del lugar que ocupa.

 

Arar los campos, rotar los cultivos, ejercer el pastoreo, recoger leña,… son actividades humanas que facilitan la persistencia y prevalencia de los humanos con respecto al resto de la fauna y a toda la flora. Incluso fijándose en lo inerte, el hombre asignó valor supremo al metal amarillo y despreció al humilde abundante polvo, al empachoso barro o a las duras piedras. Como comprobarán, estas reflexiones son tan tontas que no hay banco que se esmere en concederle valor de cambio ni parentesco de riesgo.

 

Luego la calle no es solamente el lugar donde no puede haber casas –así al menos sigue siendo hasta ahora- sino el lugar donde las casas y sus habitantes adquieren ejercicio y cordura social. Sobre la calle hay muchos acuerdos sociales: hábito en el sentido de la marcha, libertad de tránsito y regulación de preferencias, limitación de ruidos en fijadas horas, oportunidad o limitación de uso privado del espacio público,… La calle es ya el refugio de las casas, el espejo de los vecinos y el complejo altavoz de las complejas vivencias.

 

Como somos los humanos tan enmarañados, grupos diversos de sabios generosos defendieron y dispusieron el uso dela Democraciafrente a las tendencias declaradas de otros sabios más preocupados por el absolutismo de sus intereses, porque éstos fueran abonados a su dictado. Así que existió el tiempo donde las mujeres y los hombres entendieron que lo menos malo nunca estaría en casa de los prepotentes y dictadores y que, posiblemente, se erradicarían muchos egoísmos aplicando recortes y ajustes a las voluntades exclusivas de los poderosos y dirigentes.

 

La simpleza de alinear dos hileras de casas dio como resultado la calle, que para que quedara tranquila de mercaderes, voceros y gobernantes, se inventaron los mercados, los periódicos y los congresos. Ahora mismo no me entran ganas de explicar cómo funcionan los mercados, cómo utilizan la información los periódicos y cómo gobiernan los congresistas.

 

Lo que me apetece explicar es cómo yo percibo el uso intranquilo que la calle recibe de sus propietarios: no la están usando para mero trasiego, sino para sustituir a personas y colectivos que hasta hace bien poco elevaban el sentimiento popular a las esferas de los gobiernos; la están utilizando para resumir en voz alta y aguda el asqueroso manejo de lo que se conoce y se calla; la están utilizando para vomitar sobre la moral bancaria y su imposición de la usura bendecida, la utilizan para abonar la desconfianza hacia muchos de nuestros representantes políticos.

 

Por eso hay que salir a pisar la calle, para que la casa del banquero tiemble de dudas, los mass-media ejerciten el rigor molesto que da lo verdadero y la casa del gobernante sepa resistir el seísmo; porque en ésta última se encuentra el epicentro del terremoto. Si los que quieren gobernar bien salen a la calle, es posible que la calle ayude a gobernarse mejor.

 

Al fin debe ser una alegría constatar que la calle vocinglera mueve a los anodinos parlamentos, corrige a los potentados y anima a las verdades plenas.

 

Al final, sólo nos queda la calle, almacén de sueños aún no robados por los banqueros, no traicionados por los gobernantes y no callados por el periodismo de falsas lentejas.

 

¡Viva la calle! Porque sólo siente pena por sus indigentes.

Verdad y dignidad

 

Cuando yo a mis alumnos les invitaba a pensar, para que entre el grupo-social-clase compusiésemos conocimiento compartido, les invitaba a pensar sobre si pudiera ser cierto que no existiera la sinonimia perfecta; llegábamos a la conclusión no sólo de que la propuesta era verdadera y cierta, sino que nos reconocíamos en la satisfacción de haber alcanzado lo perseguido.

 

Una asentada mocita era incapaz de contener su propia emoción cuando descubrió la tremenda distancia que existe entre las palabras “cansada” y “fatigada”. Era la época de los Pokemon, y supo bien claro ejemplificar cómo el reiterado ejercicio limita la ejecución del trabajo, y aparece el cansancio, y de cómo, sin necesidad de ejercicio, la maquinaria disponible puede mostrarse incapaz de iniciar los trabajos por que ya está definida la fatiga: Cansancio puede evolucionar a fatiga; pero no al revés. Si ustedes no logran percibir la diferencia, seguro que la causa está en que ya dejaron atrás la época del cerebro abierto; que no pasa nada, que en cerebro cerrado no entra basura.

 

Mis alumnos solían tener la edad que media entre los once y los catorce años, que decimos algunos que tal segmento de edad ocupa el imperio de los aprendizajes lógicos más objetivos y significativos y que fijan las raíces más profundas para posteriores ejercicios de captación y reserva de verdades. Quizá por el uso continuado del embrujo afectivo e intelectual de la preadolescencia, yo me haya contaminado y corra el riesgo de presentar ñoñerías de niñato con la misma evidencia a como se presenta la silicosis en algunos gobernantes.

 

Bien.

 

O mal,… el caso es que ayer presencié batalla dialéctica entre defensores de la limpia de trabajadores de diversos medios de comunicación pública de radio y televisión, y defensores de la renovación de trabajadores al modo y ajuste de lo que habían recibido las urnas; estos segundos, aireaban que no eran periodistas los cesados, sino que como habían entrado como políticos, no podrían exigir seguir como periodistas. Ustedes sabrán que en la boca de los profesionales de los mensajes públicos suele encontrarse un ejército oculto de medias verdades, entre las que convendría explicar ahora mismo el porqué el resultado parcial y político de las urnas convierte a los nuevos contratados en profesionales imparciales periodistas no políticos.

 

La dignidad, que no es sinónimo de nobleza, es la condición autónoma de valor social construido sobre la persona que se ha comportado como los reyes absolutos decían que debían comportarse los nobles obedientes. La dignidad no se deposita en la persona digna, sino que está y permanece tan sólo en el reservorio afectivo de los que pueden aplicarla; por eso, con tan sólo que nuestro ambiente próximo retire su consideración positiva hacia nosotros, nuestra dignidad se diluye y es sustituida por un espectro de banda ancha que media entre el desprecio y la pena. Pero otra de las características de la dignidad es que se puede alcanzar en el ejercicio puro de la contradicción: el noble obediente, a su vez podría comportarse como autoridad absoluta y alumbrar su imperio con pernadas un tanto bendecidas y consentidas.

 

Hoy he escrito un twit –un gorjeo de ave cantora-:“Ya el problema no es la verdad ni dónde debe refugiarse; el problema será cómo soportar la duda y la ausencia.” Me parece una verdad digna porque me ha predispuesto a creer que los nuevos profesionales de la voz, los nuevos transportistas del mensaje, van ejercitarlo sin matiz político y tan solo con nervio periodístico. Esta incómoda verdad, es tan indescifrable, que bien puede manejarse como mentira descifrada.

 

Sobre qué se debe hacer para evitar la verdad redonda y monolítica que viene rodando, es tarea diversa y combativa. A mí lo primero que me apetece es pedir perdón por las obras y pensamientos que han molestado a mi gente prójima, a los que yo creía que el inalcanzable Estado del Bienestar se convertiría en el estado absoluto que nos facilitaría la nobleza sin necesidad de título, castillos o herencias. Ah! A resultas de las nuevas creencias, el uso de la herencia nos quiere dejar como príncipes desnudos y se relamen los bienes de manera privada sin posibilidad de control público.

 

Así no es posible pacto noble para trabajar contra el ejército de la crisis, que tiene en sus filas a mucha tropa dirigente: han de entregarse todas las armas, unificarse y pedirnos perdón. Yo lo vuelvo a pedir por segunda vez.

 

Quizá así se inicie el despegue ilusionado que rescate ala Políticade los campos del desprecio o de la pena.

Goyo

18-jul-12

 

Ripios pa joderse

 

Que se jodan

 

Levantada la mañana,

Y antes del atardecer ,

todos cantamos a coro:

“que se jodan otra vez”.

(Estribillo ad libitum)

Que se jodan, que se jodan,

Todos cantamos a coro

Que se jodan otra vez

Que esto lo arregla Montoro.

 

Curiosos son los recortes

Más curioso es el rescate

Nos quedan sin los peones

Para darnos jaque mate.

 

En cura de enfermedades

Nos aplican la paciencia

Por estas razones sobran

Muchos servicios de urgencia.

 

Es la vida la que enseña,

Hay que abaratar la escuela;

El dinero, que es de todos,

A la privada se vuela.

 

Me han achicado el salario

Para engordar al banquero,

Rezaremos el rosario

Que eso sí que da dinero.

 

Tuertos, tontos y amputados

Vamos quedando tullidos

Esto de ser populares

No es lo que habían prometido.

 

Me ha quedado una gallina,

Una chota y una cabra

Como se entere Montoro

Nos manda a la dulce Fabra.

 

Contra la tala de ayudas

Y tijeras que nos podan

Cada vez más españoles

Van cantando el que se jodan.

 

Goyo

16-jul-12