¿Qué fue de los cantautores?

 

 

Otra vez, bendecido el Quebranto Estatal por las finanzas, las aguas sucias arrastrarán de nuevo los derechos de una generación que los conquistó, aquellos que la siguiente abusó y aquellos que las presentes muestran sus manos incapaces para retener el grano y hacer volar la paja.

¿Cómo no vas a tener el tiempo merecido para percibir un futuro más aguerrido que el que nos presentan los financieros derechicados al extremo?.

Gracias, Luis Pastor por tus ánimos.

Vídeo de cabecera.

 

Goyo

07-sep-12

La patera

 

Perdón.

Esta noche, el cielo negro se ha dejado dibujar una luna como con dos finísimos cuernos; al poco, la oscuridad se ha completado.

Hemos cenado al aire que refresca los treinta y tantos grados de la tarde. La brisa árida al menos también es brisa. La conversación evade; pero más evade el pensamiento.

Perdón.

El ruido del agua domesticada me traslada al agua de la mar inacabable y al ansia de huida africana. Siento que sobre alguna patera nacen los murmullos que mezclan sabiamente recuerdos y anhelos. Los golpes de las olitas dulces empujan al sueño.

Esta noche no descanso en la cama, he decidido dormir a la cómoda intemperie. Dispongo las colchonetas del balancín que también hace de sofá y me arrullo con los imaginados golpecitos de agua que endulzan las sufridas maderas de la barca finita.

Perdón; pero así no tengo miedo. Imagino que el balanceo artificial debe ser parecido al de la fragilidad de la patera. Allí, el diverso grupo humano sacude sus miedos mezclando con cuentos africanos sueños europeos. El mar tiene su brisa hostigante y repleta de sales, y al decir del que piensan que sabe, indica que la barcaza sigue acercándose a la costa.

A ver si estos dioses inundan de suerte a los atrevidos, aunque yo esta noche no pueda conciliar el sueño.

 

Goyo

23-ago-12

Una fiesta para quince pueblos.

 

 

A la Mancomunidad Tajo-Salor.

A sus dirigentes, trabajadores y vecindario.

Yo soy mancomunista porque creo que nacer en un pueblo y sobrevivir a la infancia de los pasados años 50, deja señal imborrable, ingobernable y sensible.

Durante los años ochenta, cuando ir a trabajar a Europa era un lujo de gente escasa, yo viví el ajetreo ilusionante de aquella Bruselas que nos recibió con los brazos abiertos, las autopistas iluminadas por la noche, los trenes rápidos y puntuales, los aeropuertos con aviones y los viajes combinados Bruselas-Estrasburgo-Luxemburgo (una cosa así como Casar-Arroyo-Malpartida, pero a lo bestia). No obstante a nosotros nos seguía gustando el pueblo y, en un despiste antropológico, regresamos al territorio de la infancia.

Antes del regreso, algunos lugareños belgas y alemanes supieron algo más de este secarral que subsiste en los márgenes del río más grande de la península y, a lo poco que se movieron por sus alrededores, resumieron y me dieron el consejo que también pudiera servir a nuestros días y a nuestras gentes: “No dejéis que esto desaparezca, no cometáis el error que nosotros cometimos.”

Parece que desde aquellos entonces supimos resistir a la tumultuosa marcha hacia la sociedad prometida: un territorio donde solo existan las ciudades construidas gracias a la extinción diseñada de las aldeas de cazurros y paletos.

Muy en contra de la tendencia inaugurada en tierras castellanas del norte, durante la última década del pasado siglo y la primera del presente, los pueblos grandes y los pequeños pueblos de esta comarca vieron cumplidos sus esenciales servicios de infraestructura y sus elementales salvaguardias sociales, en ese orden. Desde hace como un año, una suma desgarrada y forastera de abandonos de gestión -y de gestión del abandono- se desliza por el conjunto de los pueblos de nuestra Mancomunidad.

Se borran las urgencias quizá por así será fácil eliminar las importancias. Esto es como si dejamos la bola de nieve en mitad de la ladera, nos subimos a la cumbre para otear y abandonamos a los paisanos en el valle. Supongo que esta técnica gubernativa podrá denominarse “herencia gravitacional”.

La esencia que incita al desprestigio y a la desaparición de las mancomunidades en nuestro país, parece proceder del mostrenco y no demostrado vicio de que “…es que se duplican servicios y por doble se gastan los dineros las administraciones.”

Hagamos entonces una relación exquisita de aquellos servicios que por duplicado recibe el paisanaje, publiquémosla para que la gente sepa, y apliquemos después las podas a los repetidos o abusivos. Incluso las sanciones a donantes y donados.

Vayamos entonces a preguntar por casos sencillitos y aparentemente inocentes. ¿Quién se va a ocupar ahora de cortar las uñas de las manos y de los pies a los ancianos?, ¿quién se dedicará a detectar, corregir y proponer alternativas a la juventud que cae en las drogas?, ¿de dónde procederán los servicios técnicos urbanísticos para que nuestras fachadas y formas arquitectónicas sigan demostrando cultura?, ¿quién va a proteger a los trabajadores del Centro Especial de Empleo, a los agentes socializantes, a la vida asociativa,…?, ¿cómo atender a las tareas inacabadas del territorio de la igualdad, de la protección al menor y del amparo a los menos capaces?, ¿cómo se arreglarán los caminos para que los sufridos ganaderos transiten a la manera que hasta hace nada hacían?, ¿qué inquietudes culturales, artísticas, de ocio cuidado,… se van a promocionar a partir de ahora para garantizar y poner en poso la cohesión ciudadana de nuestros quince municipios?… ¿Han comprobado ya cómo se puede hacer más con menos?

 

Ah sí!, -podremos responder- ahora mismo está organizándose una fiesta que consume diferencias y muestra a través de la gastronomía de un pez –que ni es del Tajo, ni es del Salor- lo que parece símbolo de unión. Bendita sea la tenca aunque viniese de China, que de allí vienen ahora las más de las cosas; bendita sea porque nos sirve al menos para acordarnos de alguna de las pocas personas que siguen creyendo en esta tierra sin necesidad de tener antes una Tenca de Oro, bendita sea por si su agradable ingesta sirve para contaminarnos de nuevos futuros a la vez que celebramos los éxitos de cosechas pasadas; porque la fiesta de este año 2012… ¿qué pasado gozoso y reciente va a celebrar?

Ustedes deben saber más. Deben saber rebelarse ante las fuerzas negras que incluso emanan de los mismos partidos políticos y deben utilizar esta Fiesta del la Tenca como altavoz reivindicativo, declarativo y programático de lo que merecemos los paisanos de estos quince pueblos una vez comenzado el mes de septiembre: cuáles van a ser los añadidos, qué sumas nuevas se incorporan y cómo obtenerlas, dónde colocar las mejorías, dónde detectar y eliminar abusos si los hubiere,… porque si no es así, esa foto que a la ocasión se hacen alcaldes y gente gorda en el escenario, va a quedar un poquito verbenera, empantanada y tristona. ¿No les parece?

 

 

Goyo

21 de agosto de 2012.

 

Las medias

Ya oyeron ustedes alguna vez la insana sentencia de que “la medias no son buenas ni para las mujeres”, expresión que me duele por la cantidad de desconfianza que siembra y la enorme cosecha de desprecio que se recogen en los campos de la solidaridad y de la honestidad.

El último grito se ha oído. Las fuentes de donde se han obtenido las informaciones debemos entenderlas como fiables y, salvo rectificación o aclaración que se ofrezca, ni los patronos, ni los obreros se han dedicado a desmentirlas o a matizarlas. Ya el año pasado ocurrió situación pareja y fuimos capaces de tomarnos las uvas en espera de un Año Nuevo y Feliz; acabamos de superar la mitad del tiempo y no parece que la otra mitad sirva para construir una media ilusionante.

Basta de florituras: en referencias al año 2011, los empresarios declararon haber ganado anualmente, de media, 8.275 euros y los trabajadores, declararon haber ganado una media de 19.359 euros. Este es un país diferente a los diferentes países; o la media de los patronos son cucos o la media de los obreros protestan sin sentirse solidarios con los promotores sociales que son los verdaderos motores del desarrollo económico: los empresarios.

Las conclusiones que pueden derivarse ineludiblemente de esta situación declarativa, son abundantes. Yo no voy a resaltar todas las que se me vienen a la mente porque si usted ha sido capaz de leer hasta aquí, seguro que será capaz de descubrir escalofriantes silogismos.

No me parece correcto que -de media- un obrero sumido en la tristeza de la crisis gane al año más de dos veces más de lo que dice ganar -de media- un empresario; a no ser que, el conjunto de la masa obrera hispana se haya dedicado a tirarse el pisto mintiendo descaradamente. Ya sabemos que otra de las desgracias de los pobres radica en su incorregible capacidad de hacer el gilipollas.

Porque Hacienda somos –de media- todos, deberemos percatarnos que a la luz de la oscuridad de estos datos, poca claridad arroja sobre la economía oculta y la negrura empresarial.

Hacienda ya no es la patria contable que recoge impuestos y distribuye cohesión social, más parece el mentidero sagrado de los académicos e ingenieros de las medias.

Trabajo que quieren darle al señor Montoro.

Goyo

16-ago-12

 

 

Falange distal

 

Era del dedo meñique de un pie, de un niño de corta edad de hace miles de gobiernos. Por ese huesecito, por donde fue encontrado y por los restos colaterales de la excavación, los hombres y mujeres de ciencia deducen procesos, valores y conductas de aquellos antepasados lejanos. Todo un minúsculo dato informativo ha sido suficiente para edificar los complejos conocimientos y quehaceres humanos de la época.

Pues bien, animados por toda la magia constructiva y deductiva de los paleoantropólogos, otro complejo equipo de expertos, dirigidos por el que esto escribe, ha realizado el estudio completo de varias cabezas vivas de varios dirigentes de fama diversa. Naturalmente, también se ha detectado y analizado el aparataje colateral.

Comenzamos tapándole el foramen magnum para que lo importante no se derramase, comprobamos que la fontanella estaba ya cerrada, medimos la contaminación de la sustancia gris, que tiraba ya a negra, comprobamos que en el cuerpo calloso residían en verdad las convicciones más profundas, allí estaban también la glándula pineal y su vecina hipófisis sentada en la silla turca. Componiendo el armazón y cerrando, los muchos huesos soldados protectores del cerebro abrigaban al plomizo gris interior que debiera ser indicio de cierto nivel de inteligencia,… Cabe destacar que las cabezas elegidas presentaban incluso parte de calvicie. También las había con cabellos rizados descansando sobre los occipitales.

 

Y nada.

No hemos sido capaces de obtener conclusiones acerca de las obras y oficios para evadir lo que dicen que está cayendo; pues lo que proclama el hemisferio izquierdo lo derrama el derecho y lo que atisba el frontal lo despista el temporal. La sustancia blanca ya no arrastra pureza y la gris no empuja sabiduría. Una papilla amorfa y azulada lo inunda todo y se expande saliendo por los ojos, las orejas, la nariz y la boca. Las descalificaciones taponan los oídos y las pruebas visuales nublan el razonamiento.

Me dicen que otro grupo de expertos está inmerso en el desarrollo de un nuevo proyecto que espera obtener datos relevantes a partir del estudio profundo de la entrepierna.

 

Acabamos de adentrarnos en la sociedad de la información.

 

Goyo

11-ago-12

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Por tan poca cosa, en estas épocas, no me parece inteligente el alboroto neopolítico que hierve acerca de la denominada “sociedad de la información”. Siempre ha sido más abundante la información que el conocimiento y siempre la sociedad ha funcionado más a base de información que de conocimiento. Diríase incluso que se gobiernan sociedades sin conocimiento.

 

Siempre ha existido la sociedad de la información; nunca seremos capaces de evadir su influencia. Aún para el humano que no aspira a conocer, todo es información. Incluso para el humano que desea inclinarse a otras pasiones, le es necesaria la información.

 

Cuanto más y mejor nos acienagamos en el conocer, más difícil se nos presenta la distinción de los conocimientos, por lo que aquellos que desean aprovechar la confusión de la ciénaga, tienen bien fácil fabricar una maroma aparente que prometa la salve de esas tierras movedizas: Un ejemplo de maroma de este tipo se construye con la expresión “Menos impuestos, más empleo”. El caso es que todo el mundo informado admite de esta frese infeliz tanto la maldad del raciocinio como el acierto seductor.

 

No hace falta resucitar a Jung ni acudir a los apuntes secretos de Roschard, pero una campaña electoral basada en el lema “fóllate a quien quieras” tendría un potencial interpretativo que me gustaría bautizarlo como “universal político”. Un universal político es una expresión que aún siendo rechazada, incita a despertar las más variadas controversias. El obrero al patrón, el revoltoso a la policía, el tendero al mayorista, la Maruja al carnicero, el diputado .

 

Uno recibe una información y no se queda pasivo sino que la asimila, aún rechazándola, la unifica con las informaciones que poseía, le concede carácter futuro y comienza a planificar o a actuar en función del mecano que se construye con todas la informaciones. Otra cosa es la acción, que no siempre obedece a los principios de la razón.

 

Ni en los tiempos de las luces fueron tiempos de la razón, sino de la persuasión

 

Siempre estamos en la sociedad de la información porque nos construimos y reaccionamos según la información recibida, almacenada y construida; pero no siempre la sociedad, sus miembros gobernados y sus líderes gobernantes, se gestionan por la razón. Creo que en esta época también impera la persuasión.

 

La persuasión quizá convenga entenderla tanto como el conocimiento como la capacidad de convicción fundada en la creencia futura de que la felicidad humana bien puede no proceder de decisiones razonables, sino de intenciones ilusionantes.

 

Por ejemplo, en el medievo, si hubiera habido elecciones democráticas, un buen lema hubiese sido: “Más monasterios, más empleo”

 

A pesar del racionalismo económico de “El capital” y de las revoluciones etéreas y sangrientas, seguimos pensando que el trabajo no es inmanente y propio del humano sino que es una concesión del empresario. Modernamente, se impone la idea de que el trabajo es un producto estatal, gubernamental,… de los dirigentes políticos. Y lo creemos con tanta certeza que las preocupaciones socioeconómicas más elevadas las depositamos en la clase política.

 

No sé si nos damos cuenta del poderío de la información contaminada, que es información verdadera, que tiene dos partes esenciales de verdad, la mitad que interesa coger y la mitad que interesa añadir. Y esto es un ejemplo de mitad y mitad; pero encontraremos abundantes ejemplos de cuarto y tres cuartos y de cuarto y mitad.

 

Lo del corpus académico tiene parte de residencia en las Universidades y cada vez más, en la red cibernética y así como a Copérnico y Galileo

 

Si seguimos funcionando a la ancestral manera o si

Mazapán

 

Las orejas tienen forma de esas orejas que la textura del mazapán puede imitar,… de color cerúleo, no creíble aún, pero anunciadora de que allí está el lobo, porque son del lobo por mucha cera que falte por arder. A esta gente que nos rodea, porque nos sentimos en sus adentros, se les acaba de aparecer la visión y muestra.

 

Hemos recibido el mensaje.

 

Ahora mismo estoy observando la técnica de caza de una pequeña salamanquesa o saltarrostro, o algo parecido. Lo mismo antes se habrá dedicado a colocar anuncios publicitarios en el blanco muro; por ejemplo: “Menos oscuridad y más mosquitos”. Y la pléyade diversa de microinsectos amantes de las paredes blancas de la noche, puebla el paramento vertical. Un pequeño díptero acaba de revolotear y posarse como a siete centímetros de la cola del ingrávido reptil, que debe tener una especie de rádar y resorte que lo hace saltar y girar para colocarse en sentido contrario al que descansaba. Se acerca y, sólo tres pasos hacia el mosquito detectado, le sirven para lanzar el cuello, abrir la boca y mostrar la turbulencia corporal que indica que el festín ha seguido a la caza. No hace falta permiso. No hay veda. No misericordia. No recorte. No amor. Los chupópteros gigantes no se posan.

 

Las orejas del lobo se han mostrado como si hubiera sido el arcángel Montoro el encargado de visitar y anunciar la mala nueva: “no tendréis paga extra de Navidad”.

 

Así me parecen las cosas. Podemos mandar más locates a las calles porque los manicomios son caros, podemos arrojar niños a las calles porque las guarderías son caras, podemos reducir derechos porque mantener derechos es mucho más caro que mantener privilegios, podemos reducir personal sanitario, achicar trabajadores, cortar salarios, podar ayudas, rechazar, herir, negar,… pero quitar la paga de Navidad raya tanto a las Sagradas Escrituras, que hasta ahora mucha gente no ha descubierto el drama diseñado y dispuesto. Lo mismo si deciden anular la mensualidad de diciembre y mantener la paga extra de Navidad, no forma el miedo tal alboroto; pero eso de quitarnos los polvorones, los langostinos y las uvas, es mucho peor que el penalty de un embarazo.

Ahora, el sentido hospitalario y justiciero vaticina que los sin papeles pagarán lo mismo que las grandes fortunas por tener seguridad social; todo un manifiesto comunista nacido del núcleo nife de los neocon.

Ahora hemos visto con claridad el ojo de la tormenta que sigue cayendo sobre el Estado de la Clase Media, convirtiéndola en tumulto de rojos pordioseros, desafectados en algarada, arrepentidos de pueblo y desahuciados de escuela, casa, salud y trabajo.

Todas esas ausencias podrían haber sido soportadas por el gentío que gozó al sumarse a un cambio ilusionado, porque también se sumaba hábilmente, al asco orquestado hacia la parte más cercana y sensible de la clase política: los concejales de pueblo, los políticos apasionados por atender a los que tienen a su lado.

Ya no hay tiempo para la marcha atrás y siempre se han mostrado contrarios al aborto.

Nos cuentan los libros de historias que el turrón fue el dulce y descubrimiento premiado por los nobles porque sirvió para soportar un largo asedio de aquel castillo valenciano.

Nos quedan sin turrón, nos rodean por todas partes pero no debemos preocuparnos; el éxito de este gobierno se ajusta a un estudiado plan de sostenibilidad superavitizada procedente de los bárbaros del norte.

 

No lloréis las uvas, que os atragantáis.

 

Goyo

08-ago-12

Ecologías de Andrea Fernández Maneiro

 

 

 

Hoy comparto en mi blog un hermoso poema verde de mi amiga gallega Andrea Fernández Maneiro; pero yo creo que sale más bonito allí donde lo he copiado.

 

Cuando los árboles puedan votar
todos los políticos serán ecologistas,
los leñadores abandonarán las armas
y quizá alguna tribu sin sufragio conserve sus tierras.

Cuando los árboles voten
los fumadores apagarán sus colillas,
los políticos tendrán ética y estética
y quizá alguna planta invasora retorne de su emigración.

Cuando los árboles emitan su voto
confiaré en los ecologistas de verdad
en los políticos con ética,
en las plantas invasoras,
en los leñadores;
porque será entonces
cuando las tribus silenciosas tendrán voto
para mudar el mundo, ponerlo paras arriba
y disfrutar de la hierba húmeda del universo.

Pero, mientras esto no pase,
soñar que los árboles votan
es una locura que reforesta,
un relámpago hecho alumbrado público,
un espasmo convertido en energía;
es la esperanza renovable,
el reciclaje del alma;
es al fin, un jardín del edén,
escarbado en el asfalto ,
una urna convertida en una maceta
de metacrilato demócrata,
pozo de los deseos moderno,
donde dejar el voto del futuro deseado.
(30/07/2012)

 

 

Saludos a todo el personal sensible.

Goyo

07-ago-12

Canción del verano

 

De agosto fue el día tercero
Noche de la luna llena,
Mojé pluma en el tintero
Para contarles la pena.

Para anunciar el descanso
Se convocó al periodismo
Que como cordero manso
Resistió frente al abismo.

En esto llegó Mariano
Y se sacó de la manga
La canción de este verano
con pandereta y charanga

Feliz verano,… el que pueda,
y el que no pueda, resista
que quien resista esta rueda
se hace el dueño de la pista.

De todas las vacaciones
Que produce este verano,
Muy diversas soluciones
Nos recomienda Mariano:

El que pueda, que se joda;
Que sin vacación se queda
Que ya se ha puesto de moda:
que se joda el que no pueda.

El que pueda, que se joda.
Que si te duele una muela
Y no puedes ir de boda,
Que se joda el que no pueda.

El que pueda, que se joda
Que aunque tengas buen currelo
Se está poniendo de moda
Que el sueldo esté por el suelo.

Que sin vacación nos queda
Tenedlo muy bien presente
Que jodiéndose el que pueda,
Nos jodemos toa la gente.

Goyo
04-ago-2012

Hacia el Estado del Malestar

 

A mí siempre me gustó definir al Estado del Bienestar como aquel que provoca malestar en los poderosos. Hasta el día de hoy, no he encontrado mejor definición y, dadas las reiteradas muestras de desprecio y desprestigio que los poderosos deciden y ejecutan contra los desfavorecido y débiles que, hasta hace bien poco, formaban parte de una sociedad que les repletaba de atenciones y cuidados.

Este humanismo, como muchos otros humanismos, lleva consigo un incontrolable nivel de abusos de la gente cuca que se oculta tras la maraña de generosidad social; y eso cabrea a los pudientes, que se sienten injustamente protagonistas porque las riquezas que ellos generan se dispensan entre los mediocres. Tal es su modo de entender.

Con aderezar convenientemente este truco trilero, es bien creíble por parte de algún sector social que, por ejemplo, una sociedad puede mantener sus acostumbrados servicios básicos con menos impuestos, lo que favorecerá más empleos. Así los cucos no dudan en atender a las invitaciones pues si desean trabajar, tendrán ofertas; como si desean evadir a la Hacienda de Todos, podrá ser contemplado como viable, soportable, incluso justificable. A la moderna expresión: sostenible.

Implantados los calzos, las hormas y los achiques, al mundo mediocre nos salen ampollas diversas: quien no tiene un pariente mayor desatendido, tiene otro menor sufriendo impensables restricciones escolares, otro mediano que no sabe ya para qué sirve estudiar y otro grupo compacto de coetáneos entre los que difícilmente se identifican de forma voluntaria a los subieron al poder de un cambio verdaderamente radical: se hace con fruición y ansias lo que se anatematizaba hace menos de un año.

Ahora los poderosos tienen todo su bienestar, sumado al que teníamos nosotros antes. Quizá el slogan «súmate al cambio» significaba ya eso. No es otra cosa la Sociedad del Malestar que tan brillantemente les hemos puesto en bandeja.

De cómo se quiebra esta falaz delegación no es tarea de gentes mediocres.

Goyo

01-ago-2010