Música

Dicen que es de vieja como el tiempo en que se descubrió que el audio puede tener tanto valor como el vídeo; una flauta hecha aprovechando un hueso de buitre -ya veis cómo afinaban en eso del reciclado- se ha encontrado en Alemania, cosa natural de dónde quizá le venga la fama en eso de hacer las cosas perdurables y exactas.

Ahora están en el intento de conseguir una copia para comprobar cómo puede sonar ya que en el hallazgo el instrumento se presentó roto en doce trozos. A ver si así suena la canción del verano, que hemos entrado en él sin que conozcamos cual será la dama que acompañe a Paquito el Chocolatero en las verbenas.

Buen arte este de la Música. El pasado domingo estuve casi las doce horas (de 12 a 12) escuchando algunos de los grupos que pasaron por el Matadero de Madrid; buen rollito, la pena fue que pude escuchar la misa dominical de 12 a 14, todos los domingos, ¡oigan! … El Rimadero de Jotamayúscula.

Los expertos aventuran que desde el tiempo de flauta encontrada «la música pudo contribuir a consolidar la formación de grandes redes sociales formadas por grandes grupos de cazadores recolectores». Ya veis, con buena música no hacía falta Twitter, ni FB, ni H5, …

Goyo
24-jun-09

Bacterias

e.coli

Desde los mil ojos, es fácil mantener una panorámica de casi todo lo que pasa y acontece; el otro día, Andrea preguntaba sobre aquellas bacterias que se comían algún poquito de residuos nucleares y conviene al caso la importancia de responder en lo que se sabe.

Realmente lo que hacen las bacterias tratadas genéticamente en 1.999 (Escherichia Coli con Deinococcus) y lo que consigue esta nueva generación de bacterias, es transformar el mercurio tóxico que aparece en tratamientos de fisión de Uranio o Plutonio, en subproductos menos tóxicos. Los elementos radiactivos se desintegran siguiendo los plazos marcados por su propia vida nuclear; en lo que nos es dado a conocer, ese proceso de desintegración es inmodificable; por lo tanto, no pueden existir, ni podemos componer, ni crear vegetales que permuten elementos radioactivos; a no ser que se modifiquen las bases de la estructura íntima de la materia.

Hasta lo que conocemos, es último solo lo puede hacer quien se tomó hace largo tiempo el descanso.

Goyo

23-jun-09

Urbaniza, que algo queda.

A mí me ponen las dudas; sobre manera, la última y más resuelta que mostraba el pasado lunes una noticia sobre una conocida urbanización privada cercana a la ciudad de Cáceres: “cuando se estropeen los viales de la calzada ¿también los pagará la urbanización?», cuestión que más que indagadora se me antoja de tal forma, que no encuentro palabra oceánica que sirva.

¿Por qué confundimos con tanta frecuencia los ámbitos público y privado?. Es posible que en ocasiones aparezcan matices que difuminen dónde comienza lo público y dónde deja de serlo; pero ante un colectivo de gente que -aparentemente- tiene tiempo de reflexionar mientras practica paseos a empujones de bolas, debieran surgir planteamientos más cercanos a los que el uso racional y legal sigue apuntando como “normales”, que significa: conformes a la norma. Hablar de planteamientos que entren en esa cosa tan rara que se sigue llamando “sentido común”, es uno de los mayores problemas que seguimos presentando los humanos. Y como por ejemplo yo mismo; que cuando escucho a alguien decir “eskellopagomisimpuestos”, además de los órganos notables, se me desordenan las tripas.

Las personas que hacían estas declaraciones, son las mismas que afirman que: «vinimos aquí sabiendo que esto era una propiedad privada, pero con el paso del tiempo nos dimos cuenta de la posibilidad de que el ayuntamiento recibiera esta zona, porque muchas de las viviendas han pasado a ser primeras residencias». Se ofrece entonces que la distinción “segunda /primera residencia” es la clave para la consideración “propiedad privada/pública”. El desafuero argumental es de tal categoría, que uno no sabe si coger el palo número siete o sentir vergüenza privada.

Este enclave, fácilmente visitable a través de Google Earth, nos muestra sus claros límites, su extensión, su forma, su hoyo 16, sus casitas con sus piscinitas,… y detalla las actuaciones y edificaciones que existían antes de que se construyese la rotonda sobre la N-630 que da acceso a la urbanización… Claro que ahora, “saber-saber” las construcciones nuevas que se han ejecutado, no las conoce ni San Google.

Para mayor castigo en raciocinio, me sigue el dolor como vecino de un pueblecito que aún debe soportar la inclemencia de un cruce peligroso, para atravesar o incorporarse a la N-630; me duelo, porque “Ceres Golf” goza ya de una hermosa y segura rotonda que da acceso a lo que ellos mismos siguen considerando “propiedad privada”. La duda que me queda es si podré yo conocer a los vecinos que han soportado el coste de la rotonda que tan buenas muestras de seguridad ofrece y de la seguimos envidiosos algunos casareños y arroyanos. Por no decir más cosas más redondas.

Bande

Goyo
22-jun-09

Lo que importa es el residuo.

A la especie humana le han asignado el residuo como guardaespaldas. No hay manera o condición que nos libre de huellas, restos y rastros; aunque aún no se hayan encontrado los despojos de la manzana mordisqueada del paraíso ( … o ¿quizá somos nosotros?). Y además, paradójicamente, los restos sirven de indicios, que son el primer apunte para llegar a la sabiduría. Así sabemos que somos algo más sabios cuando mejor sepamos administrar y organizar lo desperdigado, lo abandonado o lo no resuelto.
Ahora viene la moda de lo nuclear, del arrimarse o no de nuevo al riesgo de la energética del Uranio y del Plutonio, que una vez descubierta pareció adecuado ensayarla como arma argumentaria; ejemplo: Hiroshima, en pocas horas se convenció a todo un Imperio.

Aunque no hagas ni siquiera cualquier cosa, sudas. Sudamos tal normalmente que ya nos sirve de escusa para la ducha cotidiana. Sudamos porque producimos residuos. Sudamos hasta para molestarnos y aplicar afeites o ungüentos que simulen tanto la aparición del residuo como los efectos del residuo. Como no podemos dejar de sudar, compramos desodorantes, desudorantes, antisudóricos, transpirantes y lo que convenga aún inventar con tal de no dejar mal rastro y sí buena pista.

El uso del fuego no solamente nos descubrió eso de la energía calorífica; también nos dejó la ceniza, huella postrera … pero renovable, porque servía de nuevo de alimento a otros vegetales similares a los que habían servido para la fogata. A este tipo de actitud y uso energético lo denominamos «uso de energías renovables», actitud cada vez más aplaudida y no tanto respetada.

El uso del petróleo energético no sigue las ventajas de las «energías renovables» deja residuos variadísimos en olores, sabores y colores; al parecer el que más preocupa al gentío es una simple molécula de tres átomos: CO2. Este compuesto tan aparentemente oxigenado (tiene el doble de átomos de Oxígeno que de Carbono) sigue levantando dolores de cabeza a lo que entendemos por civilización de aquel petróleo que cambió el clima de todo el mundo menos el del desierto de donde procedía. Es su residuo indiscutible, invisible, camufable,…

Ahora se añade de nuevo la discusión nuclear porque las plantas nucleares no expulsan nada de anhídrio carbónico, su problema es otro residuo; en este caso, indigerible por las plantas.

En las «energías renovables» está la salvación. Y una de las evidencias más elocuentes de que esto es así, es la pericia y la ternura con la que los bancos y las empresas han acogido la idea y sus intereses. ¿Caminamos entonces hacia la burbuja de las renovables?.

Otra vez cumpliendo con nuestro espíritu de la contradicción, convivimos con apuestas valientes a favor de los nuevos sentimientos ambientales a la vez que somos el país que mejor incumple el contrato de Kyoto.

Goyo
18-jun-09

Ayer recibí un regalo

Quizá harto de compatir tiempo conmigo, erosionado por misteriosos tropiezos de este trasmallo, agujereado por viagreros y utilizado vanamente por ucranianas guerreras, la herramienta que tan generosamente me había facilitado la Asociación “Las Ideas” estaba ya bajo mínimos: como un plumier de aquellos de madera, con dos o tres bolis remordidos por atrás.

Se colaban ya tantos mensajes, que un día pasaron los ochocientos sin permiso; que hubo de borrar uno a uno, a la vez que se me escapó eliminar un piropo de Netoratón. Aquel día me parecía estar en un vertedero de basuras, descalcito, con un ganchito de hierro intentando encontrar los mensajes que se esperan como ordinarios.

Hoy que el santoral nos anunció que triunfó Nuestra Señora de la Humildad y que mi horóscopo decía que debo utilizar con mayor frecuencia mi capacidad de proponer iniciativas, he recibido como regalo renovado un estuche nuevo y repleto de herramientas para seguir dando la vara.

Trataré de ser más agradable en la Estética del post y me comprometo a seguir mejorando la Ética de los mensajes. Ya sé que los tiempos que rondan no aplauden planteamientos donde los principios de la moral natural soporten los argumentos; pero a ver, sin me han regalado con tanta atención ¿cómo y con qué les voy a pagar si mis amig@s no necesitan trajes para estar bien vestidos?

Jacinto Lajas tiene mucha culpa y Daniel Vázquez tiene mucha alma; Ariadna tiene una observancia impagable que la remata Carlos,… muchos me recuerdan que también hoy es motivo para tomarse una sana y fresquita cervecita.

A la salud de Chiqui.

Goyo
18-jun-09

La custodia racional y la protección de Down

Creo que una de las condiciones de sostenibilidad de nuestra especie, radica en el uso reiterado de la contradicción; con ello quiero decir que seguiremos siendo humanoides si seguimos repitiéndonos en mostrar conductas racionalmente contrarias a nuestros pronunciamientos. Para certificar mejor este marchamo de reconocimiento, la cultura de nuestros padres y abuelos nos hacía repetir que tres jueves hay en el año que relucen más que el sol: y debíamos conocer a qué tres días nobles se refería el dicho. Sigo sin descubrir resplandor especial, casi todos los días se presentan turbios.

Como si los cambios climáticos hubiesen nublado el resplandor, el Corpus Christi se resiste y ha sacado brillo este fin de semana: lucen los corpus humani trajes campsinos (No. Campesinos, no) comen con gula y derroche, cubren de regalos a los que catecúmenos y organizan la muestra señera de contradicción social dispuesta a competir con el articulado negocio del sacramento del matrimonio. No hay que asustarse, seguiremos siendo así pese al último resultado electoral. La celebración del Corpus incluye una procesión en la que el cura porta un ostensorio o custodia, que guarda la hostia para ser adorada por los fieles. La custodia suele tener forma de sol, lo que origina no pocas discrepancias.

El caso se ilumina con que un cura del pueblo barcelonés de Teià le ha negado, según la noticia, la comunión a una niña. La madre de la niña explica que el señor cura alega que la niña es “un ángel de Dios” y por lo tanto “no es una pecadora”. A tal conclusión se llega porque se parte del presupuesto que un determinado síndrome psicomédico arrastra como consecuencia la resolución de un misterio original. Si antes era también inexplicable el cómo el pan ázimo se hace cuerpo y el vino se transforma en sangre; ahora nos tendrán que explicar por qué a esta niña se le presume inocencia y al resto de la infancia se le presume culpabilidad. Quizá mejor nos sirva entender a los trileros de la moral.

El análisis sereno de la situación lo aconsejo como buen ejercicio espiritual, parece que una de las cosas ciertas es que la niña sufre Síndrome de Down; bueno… eso de que “sufre” lo decimos muy alegremente los que estamos acostumbrados a padecer las aberraciones racionales de la gente “normalita”.

No debemos darnos mucha preocupación por estos graves trastornos de entendimiento, los hay cada día blanco en que sale el sol y cada noche en la que el negro inunda a toda la humanidad.

Goyo

15-jun-09

Los idiotas y la polis del XXI (II): El quinquenio.

Deberán estar ilusionadas las setecientas treinta y seis personas; también deseosas de tomar posesión de su encomienda europea. Para esta tarea de parlamentarismo europeo, quizá existan casos animados a coger al toro que secuestró a la dama (¿sería de Cerdeña?) y la disponga limpia de estados críticos. Seguro que algunas personalidades estarán dispuestas a empezar cuanto antes a verdear la esperanza que se ha depositado en este Parlamento Europeo que tiene el largo plazo de cinco años para remendar, o para atender el surgir de los brotes. También habrá otros electos -y otras- que respiren sin dificultad y entiendan que estas cosas -sin ser de palacio- también van para despacio. (Las cosas del Parlamento, …¿van para lento?. -Esta es mía-)

El caso es que existen opiniones que interpretan globalmente lo que la suma de individualidades dispone en un voto: salta a la vista que el electorado ha depositado en las urnas un correctivo dirigido a la izquierda, que lo mismo para otros pudiera ser una demostrada confianza ciega en la derecha. Tal vez, la mezcla de «saltar a la vista/confiar ciegamente» nos dé una Europa tuerta.

Para el discurrir de algunos analistas, como la socialdemocracia no ha sabido solventar la crisis provocada por las perversidades del capitalismo, el electorado entiende que la recesión consiguiente tendrá una gestión más efectiva si el problema lo toma en sus manos el centro-derecha. Ante tal argumentario no deben extrañarse, es otro ejemplo más de la perversidad capitalista.

Así, ahora la derecha tiene no solo la oportunidad de decir las cosas claras sobre cómo corregir tan atrevida crisis, sino que tiene la oportunidad de diseñar, legislar y practicar las curas para que de nuevo la Economía sane, se revitalice y dé otro estirón. Evidentemente, siguiendo sus aireados principios de recuperación, la recesión deberá no estar tan disponible a las veleidades climáticas, a las 65 horas, a la protección de las edades extremas y otros tantos temillas de monta socialistoide, … y tiene como claro objetivo volver al feliz 2006 claro está, sin necesidad de burbuja ladrillera que ya se encargaron de explotar. Como suena.

Para este menester reflexivo, a lo mejor viene bien acudir a cómo la Medicina ha tratado de resolver los problemas patológicos mediante su ingeniería metodológica. En la Medicina clásica existen dos principios básicos, dos dualidades que aún perviven contradictoriamente: la regla homeopática que defiende que las cosas semejantes se curan con las cosas que se les parece; así que hay tratar los síntomas morbosos del enfermo con productos que en el sujeto sano producen síntomas semejantes “Similia similibus curantur” es su bandera. La homeopatía se asienta en dos principios: el de las dosis mínimas y el de la similitud . Puede aplicarse las dosis a través de tinturas, disoluciones, trituraciones, pomadas,… Si la quina cura las fiebres es porque ella misma produce fiebre en el hombre sano –defendía Hahnemann-.

Según lo que en ello se proclama, la crisis desaparecería aplicando a la sociedad enferma trocitos pequeñísimos de crisis, como paros individuales o despidos modositos; incluso “eres” pactados una vez hallado el peso molecular según la regla 7.

A mi parecer que se están pasando de dosis.

Alopatía es el término utilizado desde las posiciones homeópatas para referirse a la medicina convencional, que además de este método practica otros. El principio alópata se defiende bajo el lema “contraria contrariis curantur”, por el que se resume que curar exige la administración de sustancias que provocan síntomas opuestos a los que sufre el paciente, o sea, que la crisis se curaría medicando a Europa con aquello que provoque trabajo, dinero y servicios públicos abundantes y gratuitos.

Parece como si le están haciendo pruebas.

También está el principio isopático, que trata de curar la enfermedad utilizando los mismos productos que la produjeron, lo que, según Hahnemann, solo puede agravar la enfermedad; “aequalia aequalibus curantur“ es su rezo sagrado. Estas últimas son prácticas médicas no validadas. Muy a pesar de ello, hay profesionales que siguen defendiendo que la crisis se soluciona cuando impere de nuevo el ladrillo.

Existen otras metodologías que usted mismo podrá consultar en cualquiera de las páginas que la red nos ofrece. Además, queda como último recurso la cirugía.

Quedan aún otros métodos menos conocidos, otros más escondidos y exotéricos, chamánicos, santeros, … incluso los de caña y barra.

Para los pobrecitos que no llegamos a las alturas intelectivas de Paracelso o de Hipócrates, nos agarramos con mayor fuerza a los refranes de pueblo: parece que han puesto la zorra a cuidar gallinas.

Goyo

12-jun-09

Picotas

El frutero que atiende a las inmediaciones del colegio, me ha regalado hoy una hermosísima caja de cerezas. Son dos kilos que pesan más que el huevo del bigotes, tienen un brillo bermejo como si eso debiera recordarme algo y están exentas de pedúnculo, que es una de las señas de identidad de las picotas.

Además, tienen un calibre “22y+”. No acompaño foto porque conviene darle al magín.

Llego con esta joya al aula, que está vacía porque l@s element@s de aprendizaje están retozando Música, y pienso cómo se comportarán los pupilos -y las pupilas- cuando regresen y vean la caja colocada en la entrada/salida de la clase, que es el lugar reservado para el distribución de folletos, instrucciones y demás cosas de tomar y repartir.

Llegan los primeros, ven la caja, miran las cerezas,… me miran,…asiento y, trasladan al instante el mensaje no verbal.

¿Cómo ha quedado la caja después del recreo?

Pues, no señor; me han quedado las suficientes para demostrarme que eso del derroche, de lo gratis total y del “ahoram’aprovecho” no está tan repartido como yo pensaba.

Goyo

11-jun-09

Los idiotas y la polis del XXI

¿Por qué se habrá muerto Bertrand Russell y toda su Sabiduría de Occidente?. La Europa que se construyó con esfuerzos solidarios, apunta en estos días hacia el Estado del Malestar porque de bienestar parece llena y repleta. La calamidad social que arrastra el ser humano cuando no puede cambiar su inteligencia o su esfuerzo por dinero, se ha revelado -precisamente- contra las ideas que anunciaron y denunciaron los abusos usureros: que la crisis la sufran también los críticos y que los más inocentes sufridores crean que de nuevo conviene dar libertad a Barrabás.

Los peones- y las peonas, al sabio decir latinoamericano- han vuelto las espaldas a sus pobres razones para seguir siendo pobres convencidos, que es la manera más triste de ser pobre. Eso también puede conseguir la democracia; pues de la misma manera que izó al poder al partido de Hitler, podrá concederse Europa un quinquenio de retrocesos para ver si así las mermadas cuentas de banqueros, asesores y promotores reviven otra burbuja, que lo mismo puede ser “verde eco” que “rojo ladrillo”. El caso es seguir respirando con derechos ajenos.

Además, ya no hace falta la penitencia ni el confesionario para el perdón de los pecados: una vez anticipado el secundario fin las votaciones, los italianos podrán adquirir trajes milaneses y los nuevos caballeros podrán acudir a fiestas de amplias miras y jóvenes edades.

Bertrand Russell rescató el cultismo “idiota”, que en la Grecia clásica se aplicaba a la persona que no acudía al ágora para participar en las decisiones que afectaban a todos; los que sí participaban se hacían llamar “politiKón” y aquellos que utilizaban ese tiempo para gustar de buenos vinos y de hetarias, los que se dedicaban a “sus propios asuntos” se llamaban “idioton”. Este último término dio en nuestra lengua, con otro significado bien diferente, la palabra “idiota”.

Ya no sé qué dará en el futuro la palabra “demócrata”.

Goyo

08-jun-09