Ágora y Extremadura

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Suele ser necesario repetir muchas veces las cosas para acercarnos a su entendimiento; ya lo decían aquellos griegos de veinticinco siglos atrás, que solían utilizar la noche del sábado para comentar y ayudarse a decidir sobre los asuntos de su “polis”; eran los “políticos”: las personas inclinadas a sentirse partícipes y responsables de las decisiones de gobierno compartido por discutido. Los otros vecinos que a la misma hora y en distinto sitio se inclinaban por los vinos o por las hetarias,… en fin por sus apasionadas tendencias individuales, eran los “idiotas”; término éste que ya ven cómo ha variado de significado… (bueno, a decir verdad, el otro término también parece sujeto a fuertes cambios).

Ágora” es palabra griega que hace referencia al lugar donde se ejercen públicamente las relaciones interpersonales de cualquier polis griega. Como parece sensato seguir repitiendo lo inmejorable, desde hace años el gobierno de nuestra región instauró una especie de feria anual de debates entre los vecinos euroibéricos: extremeños y portugueses dispuestos a borrar una de las fronteras más asquerosamente impuesta.  Así, ahora, Portugal nos considera papel central en las relaciones con España y Extremadura ya se cansó de darle la espalda al oeste lusitano; quizá por eso el presidente Vara propone a Portugal una cooperación mayor con el Alentejo y con la región Centro. Mire usted por dónde, los que nos felicitamos y los que felicitan por este trasiego de buenas voluntades adquieren por algunos comentaristas anónimos el calificativo de “pesebreros”, sin aclarar aún si con ello nos asignan pertenencia a la cuadra extremeña o a la portuguesa.

Los comentarios, que siempre hay que defender que sean libres, deben ser con la misma fuerza no erosivos; y algunos de ellos son pedradas que se lanzan desde un nick que enmascara en exceso a la persona para presentarla desnuda y desprovista incluso de razón. Más que comentarios parecen lapidaciones talibanas, con turbante incluido.

 

De todas formas, incluso de las malas formas, no convendría rechazar de plano las pasiones y razones que se depositan tras los comentarios anónimos. Todo sirve si todo se utiliza con la debida mesura. Al “ágora” o la “bulé” también llegaban las soluciones de taberna. Ya no sé si por aquí hemos cambiado tanto.

Que la buena gente de Castelo de Vide y de Plasencia -por decir ejemplo- sigan distanciadas de intereses comunes es la mejor manera de permanecer que los de allí tuvieron a Salazar y los de aquí tuvimos al innombrable. (El mapa tiene también lo suyo: Extremadura costa oeste)

 

Goyo

27.oct.08 

 

 

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