Honestos

 

 

Ya saben que, cuando no conviene, a las encuestas no se le hace puto caso en espera de la encuesta verdadera y definitiva del día electoral, de cuyo resultado suele hacerse caso puto.

Ahora que vamos despacio, podemos fijarnos con quietud en lo que alumbran las últimas encuestas acerca de la preferencia o intención de voto y de cómo se distribuye entre los diversos sectores del campo político; para no cansarles en datos ni apuntarles enlaces del Gran Hermano que todo lo sabe, les resumo el asunto a mi modo de discurrir, que con eso de tanta duda que me abunda, lo propio es que tampoco saquemos mucho en claro.

En extracto, la brecha distintiva se reduce cada vez más, en lugar de un bipartidismo se ilumina un tetrapartidismo, el partido que más apoyos tenía es el partido que más apoyos pierde y los dos partidos que recibieron relativo y escaso apoyo están creciendo significativamente. Pero la sinopsis más valiosa de nuestra situación política se plasma con fidelidad en una sola palabra: hartazgo.

La hartura incluso comienza a causar efecto en la casa de la mayoría absoluta; dos concejales han abandonado lo que fue su partido porque sentían vergüenza de la situación externa e interna del PP, y lo hicieron porque ellos habían apostado por la honestidad. Una primera lectura parece decirnos que estas dos personas han encontrado la honestidad escapándose de la estructura partidista; una segunda lectura nos diría que ellos podrán pensar que los que permanecen están alejados de la honestidad. Una tercera lectura apunta a que los que quedan pueden ganar la honestidad cambiando las cosas desde dentro. Y una cuarta lectura señala que los que se quedan podrán acusar a los huidizos de deshonestos. Más lecturas no apunto pero sepan que las hay.

Leyendo en otras cartillas, cabe entonces pensar que si el partido que fue más votado sufre pérdidas hemorrágicas, habrá gente que piense que lo honesto es facilitar la sangría a la vez que otra gente entienda que lo honesto es tapar la puñalá aunque sea con trapos sucios de casa.

Y cuando observamos que hay también mucha gente percibe la honestidad huyendo de la Política; incluso defendiendo y ejerciendo la abstención en las elecciones, la duda gorda surge brillante: ¿dónde se escondió la honestidad?

 

Goyo

15-abr-13

 

Un ruso y un americano

 

 

 

Es viernes, por la tarde tirando a dar la noche; pero pudiera haber sido cualquier momento del eterno tiempo. Leo en la prensa que uno de los muchos hombres ha fallecido y que otro hombre también ha sido enterrado, cubierto de tierra,… que es la mejor bandera que puede cubrirnos.

 

 

El ruso se llamaba Mijàil Béketov director de un periódico sencillote pero repleto de coraje al denunciar el amasijo ambiental que se crea cuando una autopista invade los bosques de manera chulesca. La denuncia del abuso -y la constancia de la protesta- culminaron en una paliza propia de la gente seria: tres dedos de una mano se perdieron, una pierna debió ser amputada y algo de maltrato chusco afectó a cierta pérdida de la caja ósea craneal. A ustedes les dejo escribir el rosario de golpes, heridas y métodos que la violencia del poderoso ejercita sobre la debilidad de la información del débil. En Rusia, ya saben que eso del escrache suena a risotada.

Mijáil no ha podido superar las consecuencias de la paliza recibida en 2008 y ha sufrido el infierno hasta llegar a esta puta primavera del 2013: un maldito plan quinquenal para su muerte. 

 

El americano Paolo Soleri era arquitecto; si en mis tiempos de Concejal de Urbanismo hubiésemos cruzado los oficios, seguro que nos hubiésemos emborrachado de coincidencias. No es famoso por el diseño de puentes  que crecen en precio a medida que atraviesan el río, o de complejos edificios que demuestran la vacuidad de lo público: era un fundado y fundamentado defensor de la limitación de lo urbano; de la constricción del urbanismo para que fuese dominado por el ambiento humanista. Imaginarán ustedes que tampoco tuvo sus adalides en la zona empresarialfinancierapolitiquera, sino que sus esencias de trato y afectación constructiva se refugiaba tan sólo en algunas aulas universitarias.

A cada uno de los dos hoy quiero ofrecerles una Bandera Medioambiental que les abrigue.

Goyo

13-abr-13

 

 

Gregorías 21: escraches

 

 

  1. Un escrache, incluso irrespetuoso, es la respuesta más comedida al abuso de poder o distanciamiento del político hacia la polis.

 

  1. (@Lagazapera)Tenemos que conseguir que el Papa Francisco nos mande una noche una soleá dedicada a los pobres. ¡¡Me haría creyente!!

 

  1.  Y le respondí con ésta:Soy probecito, Francisco, no me quea na de na; sólo me quea el quebranto que cantá esta soleá. (Dedicado a Manuel Bohórquez)

 

  1. Quizá somos infelices porque dejamos pasar a los buenos ratos sin pedirles la entrada.

 

  1. ¿Qué esperáis que nos pase? Nunca mandaron los honestos.

 

  1. Pues dice un enterao que esto del Twitter reblandece el cerebro y nos incapacita para el pensamiento crítico.

 

  1. No me gusta la expresión «rentista» de RENTA BÁSICA. Prefiero SALARIO SOCIAL.

 

  1. Ya lo ven; el agua, el cauce de los arroyos, nos señalan claramente las infracciones urbanísticas y los cerramientos ilegales de propiedades

 

  1. Hay ya una nueva religión: los Creyentes del Cambio Climático. (CCC)

 

  1. Parece que no es justificable mantener a un animal fuera de su hábitat. No obstante ese principio no sirve para los animales humanos.

 

  1. El escrache más sutil y molesto se nos puede presentar a través de un Real Decreto.
Goyo
06-abr-13

 

 

Carta al Secretario

 

 

Señor, yo vivo en la Plaza de las Malvinas, en el número 35; en un pueblecito que se llama Casar de Cáceres, que está en España. Digo esto porque he leído hoy su escrito y me incita a responderle. No sabiendo con certeza dónde usted vive, quizá el mismo medio que publica su carta sepa, pueda y quiera hacerle llegar esta corta misiva.

Desde el 5 de septiembre del año 2000, han trascurrido 4840 días, de los 5840 días que nos dimos para remediar el desbarajuste objetivado en los ocho fines virtuosos; y aunque más niños nacen sanos, más mujeres paren sanas y más escuelas se extienden, la pobreza se reparte con la misma crueldad de antaño, y el resto de los objetivos, Señor Secretario, se perciben con mayor burla y desesperanza que la angustiosa sensación que produce nuestro dicho: no hay mal que cien años dure.

La nación donde yo vivo, es una de esas que figura inscrita en la Organización de las Naciones Unidas y que el año pasado redujo un 49% la ayuda oficial al desarrollo de los pueblos y naciones que decimos que no están debidamente desarrollados. Yo le pido perdón por este significado recorte y también le suplico que comprenda mi vergüenza.

Usted nos dice que nos faltan -a los humanos de este planeta- como mil días para reducir a la mitad la pobreza y el hambre en el mundo; deberá hacer un esfuerzo explicativo para que el gobierno de la nación española entienda que eso, lo mismo no se consigue reduciendo a la mitad la aportación acostumbrada.

Quizá no se trata de producir más alimentos, sino de repartir los que se producen y de impedir que el capital se utilice para envenenar las cosechas y adulterar las materias primas. Usted sabe que los dineros invertidos en bancos correctos crean riquezas en comunidades pobres, al igual que los dineros que disfrutan de la felicidad de los paraísos fiscales engordan las fortunas en comunidades acaudaladas a la vez que se ensañan con los humildes.

Quizá pudiéramos reducir a dos los ocho objetivos para iniciar un milenio humanizado: destinemos los mil días a construir paraísos ambientales a medida que eliminamos los paraísos fiscales.

Todo lo demás, señor, debiera dejar de pertenecer al infierno que estas naciones han organizado.

 

Mis respetos.

 

Goyo

04-abr-13

Periodismo de pies y cabeza

 

 

 

Con palabras elevadas, las personas decimos que buscamos la verdad porque amamos la Justicia; así, deberíamos entender que cuando fabricamos la mentira practicamos a sabiendas la Tropelía. El periodismo es una técnica de comunicación que funciona con una sabia mezcla destinada recoger, elaborar y hacer pública una información relativa a la actualidad, especialmente sobre hechos novedosos de interés, incluso sobre hechos pasados a los que se les quiere conceder relevancia nueva. Es una técnica depurada y excelsa que proviene y supera al ejercicio de la reyerta de amigotes de barra o al de la trifulca desgañitada de verduleras. Si les parece desafortunada y malediciente la comparación, no me hagan caso y dedíquense a observar tanto algunas afamadas tertulias, como otras algunas alambicadas editoriales de periódicos cercanos y lejanos.

 

Dicen los buenos consejos, que la Ética juega un papel muy importante es esta profesión, cosa que ningún periodista debe olvidar; pero que debiera exigirse con igual fuerza a cualquier persona que lee el periódico, comenta la noticia o traslada lo que ha oído en la radio. No sólo las personas que profesan el periodismo son las selectas para ejercitar la libertad de expresión según proclama el artículo 19 de la DUDH, también a las que no han estudiado la técnica debemos otorgarles el mismo nivel de libertad de opinión: Ambos niveles no deben confundirse con el nivel de libertad de embuste.

 

Nunca he asistido a una mesa de redacción; que es el lugar y el tiempo donde se decide cuál y cómo ha de ser la portada y cuáles son las noticias que van en chiquinino; los platos que se elaboran en esa cocina, tienen como destino alimentar o envenenar a la inocente clientela. Por ejemplo, los llantos de quienes no pueden procesionar se presentan ahora más relevantes e impactantes que los que provocan la falta de atención de necesidades educativas y vitales de los hijos, de los que desean tener trabajo, de las urgencias sanitarias,…. Éstas me parecen verdades más poderosas que las otras.

Algunos periodistas bien pagados, han ejercido recientemente su oficio presentando en gala televisiva lo último en belleza, que no es otra cosa que un tratamiento de desintoxicación para los pies. Por mi afición a las dudas, debo entender que está muy próxima la noticia, presentada también por diestros del periodismo, de un nuevo tratamiento de desintoxicación de cabeza.

 

Goyo

03-abr-13