Yo sé muy poco de ustedes,… quizá porque también sepa muy poco de mí. Para buscar remedio a esta ignorancia incalculable, leo periódicamente periódicos porque dicen que así es posible remediar en algo la opacidad.
Desde hace no mucho tiempo me observo aprendiz feliz cada vez que me siento frente a «Público». Se deberá esta agradable y cotidiana experiencia a que está el periódico poblado de periodistas que conozco de algunos ratitos; eso me hace sentirme obligado a no despistarme de su trabajo. No siempre me da tiempo de pagarle en agradecimiento y hoy conviene a la amistad el hacerlo. (También a la justicia, aunque no siempre haya de valer la amistad para la justicia).
El caso es que a mi juicio, la noticia de más enjundia la protagoniza la duda sobre la existencia de lo que se creía era la cosa más abundante (el 74%) del Universo: la energía oscura. La energía oscura es asunto sobre el que no tenemos aún capacidad de observación directa; la sospecha de su existencia proviene de deducciones matemáticas sobre mediciones gravitatorias. Otros estudios «oscuros» para nuestras escasas mentes, deducen que otro 22% lo forma lo que los científicos han denominado materia oscura. Así, lo que nos es dado observar con nuestros ojitos y los otros cuatro sentidos, se reduce a un pobrecito 4%.
La duda científica nacida recientemente por los trabajos de Blake Temple y Joel Smoller vuelven a poner de manifiesto lo poquito que sabemos de ese exagerado 96% universal.
Y del otro cuantioso 4%, los únicos que saben algo seguro son los científicos Cospedal y Rajoy, que aunque no puedan presentar pruebas concluyentes, le endiñan a los periódicos la sabiduría y la certeza. Por eso me gusta tanto leer «Público».
Goyo
19-ago-09
Hermosísima foto de una infinitésima parte del 4%. Copiada de «Público».