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Es tal la calidad de la aberración urbanística madrileña, que sus habitantes pueden haber perdido ya la noción de pertenencia a La Mancha; convendría entonces que los dirigidos y dirigentes de las ciudades de Cáceres y Badajoz se asentasen en un urbanismo más rural, más noble y más extremeño.

Goyo
24-ene-07

Francisco Muñoz, que además de culto es Consejero de Cultura, ha conseguido de nuestra región extremeña un nivel de “culturismo” impensable hace años; el nuevo culturismo es el creciente turismo destinado a emborracharse de cultura extremeña, de calles humanas, de paisajes quietos, de edificios sanos, de sabores incorruptos,… o si lo quieren de otra forma, debiera denominarse «culturismo» al diseño cultural que empuja al turista al ocio creativo y al disfrute artístico compartido con las gentes.

Paco Muñoz quiere ser Alcalde de Badajoz, y ya ha comenzado a lanzar ofertas sin rebajas: piensa que para un mejor desarrollo de sus políticas necesita un senado, un colectivo de personas mayores listo para llamarse «Consejo Municipal de Mayores», elegido entre los cerca de cuarenta mil pacences mayores de 65 años y que habitan su ciudad. Sobre las funciones, los límites y el procedimiento de elección creo que se escribirá mucho; pero hoy sólo quiero pensar en el alcance de la idea.

En el campo de estudio de la Antropología Social y Cultural, no existido jamás una civilización, tribu o grupo humano que no haya utilizado y protegido la sabiduría y la experiencia vital de sus miembros. En los mejores tiempos de la república romana, el imperio confió las habilidades políticas a los viejos -senectus- que aún guardaban salud, la bimilenaria iglesia ha preferido siempre la vieja opinión a la joven apuesta,… Dice Paco Muñoz que los centros actuales de los mayores «rozan la indignidad en el ámbito de la participación»: es verdad, con la misma intensidad que nos hemos creído que debemos proteger a los mayores, los hemos etiquetados como sujetos portadores de opiniones inútiles; todo una grave pecado humanista, un insulto a la inteligencia, una pérfida adoración a la efebocracia.

Al grito de «jóvenes, los queremos jóvenes» se desprecian valores que nada tienen relación con el tiempo vivido o el que queda por vivir. Otra torpeza política incrustada incluso dentro de los dirigentes actuales de todos los partido, como si nadie apluadiera que la mayor aspiración democrática estaría en convertir a todo el mundo en un presunto gobernante.

Bravo por Paco, que es culto y quiere empezar a ser viejo siendo Alcalde de Badajoz.
Que la edad y la ciudad te lo premien.

Goyo
19-ene-07

Sé cómo empezar porque hoy puede ser el primer día de otra nueva época. Ha pasado por el arco de seguridad de la Subdelegación del Gobierno en la provincia de Cáceres y he solicitado ver personalmente al Sr. Subdelegado para entregarle un folio que está encabezado con la fotocopia de mi DNI y que, escrito con letra verde y rotulada, ruega que se traslade al Gobierno mi apoyo y ánimo en la creencia de que se está haciendo lo mejor posible para lograr la Paz. No he conseguido verlo porque otros trabajos más importantes debían ser atendidos; al menos lo he intentado.

¿Qué más puedo hacer…? pues proponer. Y así como hubo un tiempo en el que fueron necesarios los «Cuadernos para el Diálogo», hubo otro tiempo que mereció ver el nacimiento de los «Cuadernos de Pedagogía», ¿no estamos en el tiempo en que se precisan «Cuadernos para la Paz«?.

Propongo entonces a este feliz mundo de «lasideas» que se cree un almacén de escritos, sugerencias, opiniones y propuestas encaminadas a lograr la paz social y política en este país, en nuestras tierras, en nuestras calles, en nuestras opiniones. Debe haber una tesitura abierta de propuestas posibles, viables y sugerentes a la gente de buen sentir. Debemos recopilar, fomentar y difundir, desde este púlpito ideólogico, tareas positivas para una mejor democracia.

Os deseo y os ruego una colaboración crítica, valentía y buen amor.

Que se callen los violentos,
los de las armas y los de las letras …
que se callen los explosivos y las desconfianzas,
que hablen los humoristas
y nos vistamos de humanismo.

Que surja el viento que aviva el ánimo
y que se nublen las razones para que la pasión serene se imponga.

Que venga la tirana paz ordenando
y castigue a los políticos amaestrados en la discordia.

Que hiervan las propuestas
y la sopa primigenia sea la única explosión de júbilo.

Que no moleste la palabra Paz.

Goyo
16-ene-07Â

Son las cinco y diecisiete y llamo a César, que está en Roma junto a la estatua del soldado desconocido. Nosotros, los extremeños, estamos tomando cafelito en el madrileño Paseo de Recoletos y pregunto que cuántas entradas, que cuántas calles desembocan en la Plaza de Colón y no me saben decir los extremeños si son cinco o nueve y me preocupa el dato porque el paseo se llena en demasía con gente toda que va como al mismo sitio aunque cuesta arriba, y le digo a César que me parece imponente y se me ponen los huesos de gallina porque la carne y la piel ya lo están.

Un poco más arriba, Rosa y los blogueros hispanos me esperan en el bar «El Espejo» pero yo no soy capaz de desprenderme de los extremeños y la llamo para decírselo. Sigo sentado de espalda al abundante gentío y presiento -con ese noveno sentido que dispongo- que algo de tsunami social se anuncia por la espalda; tuerzo la cabeza y contemplo el rotundo y sabio andar de José Saramago que se dirige a la Plaza de Colón. Vuelvo a llamar a Rosa para anunciarle que sube Saramago, que lo mismo es capaz de sacarle algo de sabiduría en pocos segundos.

Me siento; y al poco, Juan Andrés me avisa que llega otro de los grandes, vuelvo a mirar al gentío y encuentro al sonriente JAMS acompañado de dos sencillas rubias:su artista mujer y otra buena amiga. Me abrazo, saludo, intercambiamos palabras cordiales con ilusiones mudas a través de sonrisas, mientras no acierto a responder otra llamada de los blogueros.

Subimos con la intención de llegar a la plaza y allí están los sindicatos y los trabajadores, como si esto fuese el setenta y pico: los sindicatos y los trabajadores movilizando sentimientos por Carlos y Diego. Los trabajadores están agarrados a una larga cuerda que define el sentido impidiendo la confusión de la masa. Los ecuatorianos están plantados en un convencimiento postcolombino, en una seguridad de estar pisando suelo de madre querida. Carlos y Diego. Un paisano obrero, con pinta de senador de pueblo, enarbola una pequeña pancarta -seguro que hecha por él mismo- que reza: «¿Dónde están los obispos?«.

Son las seis de la tarde y el aplauso inicia el rito. La cabeza es sindical, el cuello lleno de artistas obreros, el tronco de trabajadores ecuatorianos y todo lo demás es un enorme halo que quiere ser lo que sea con tal de serlo solidario y pacífico. Las voceras y voceros comienza a ajustar los ritmos a los lemas: «¿Dónde está?, no está aquí, el Alcalde de Madrí«, «Zapatero, no estás solo«, «Toda la gente, con el Presidente«, «Telemadrí, manipulación«, «¿Dónde están? no se se ven los niñatos del PP» y otros más atrevidos, procaces, sátiros y cachondos. Y me encuentro en el río humano transportado lentamente hacia la diosa Cibeles y allí nos paran porque ya todo está repleto de contagio ecuatoriano…. algo ocurre en la espera, que se conduce en cuesta abajo, desde la Puerta de Alcalá a la Cibeles, como una bola rodante que imprime silencio: son las palabras del manifiesto que no acierto a distinguirlas. Los aplausos vuelven a rodar cuesta abajo y decidimos invadir plácidamente, peatonalmente, esa anchísima calle que se llama de Alcalá.

Lo más rarillo es que me he venido sin descifrar el alcance de uno de los lemas que repetidamente se orquestó: «Al oso bispoj, no losemoj visto» que no sé qué carajo significa.

Goyo

14-ene-07

Presiento que aún sigue siendo necesario sacar a la luz los orígenes de viejos conceptos para quizá tener mayor facilidad de comprensión de nuevas entelequias (ideales, ensueños, ilusiones,.. .).

ETA es el acrónimo de la expresión vascuence “Euskadi ta Askatasuna” que en castellano se diría “Patria Vasca y Libertad”; ese anhelo de asentarse en el terruco y asentarse en lo libre lo entiendo comprensible y me llena de sincera y cercana simpatía; pero no admito que para ello se empuje, se escupa, se insulte, se extorsione, se asesine,… así,con tristeza, nos parece a muchos que tan noble aspiración haya quedado asociada indefectiblemente al terror.

Luego está el lema de la manifestación del próximo sábado: “Por la paz y contra el terrorismo”, y el PP expresó su desacuerdo porque no se incluye la palabra “libertad, ya que se trata del principal derecho amenazado». Para mí era razón difícil de creer y he ido a la página oficial del PP, y en su portada, se puede leer hoy que «El secretario general del PP, Ángel Acebes, acusó hoy al Gobierno de haber «fracturado» la unidad de los demócratas… Acebes dijo que «el mayor enemigo del terrorismo es la libertad» y recalcó que los organizadores «se niegan» a incluir en el lema «el derecho más importante que es el de la libertad.»

Utilizando este tipo de conclusioneo barato, imagino que si el lema hubiese incluido el término «libertad» lo mismo también lo hubiesen repudiado ya que figura pleno junto con «Patria Vasca» y alguna mente retorcida podría pensar en ciertos niveles de comunión ideológica -por decirlo de modo educado-. Si atendemos a la maravillosa y rica manera de manejar las palabras al lado de caprichos cerrados, tendremos la base argumental suficiente que nos lleva a reconocer la misma habilidad tanto para inventar excusas, como para edificar acusaciones infundadas.

Y es que la Paz nunca ha sido fruto argumental de ninguna estructura silogística; es un acto volitivo, esencialmente humanoide, avisceral,… incluso admitiría que es irracional, que en lenguaje llano se dice: «a mí que me dejen de cuentos, que lo quiero es vivir en paz».

Goyo
11-ene-07
-Con todo mi cariño para Alfonso Gil, vasco libre y sufriente-

Desbaratado el espíritu navideño y regio por los días que pasan y los terrores que vuelven, me encuentro de nuevo con el ahogo de la tierra injusta: al decir del Sindicato de Obreros del Campo de Andalucía, de las cien mil hectáreas públicas que constituye la red de cañadas, veredas, cordeles y demás vías pecuarias, unas ochenta mil están “apropiadas” por los vecinos de las tierras a las que se les dio comunicación.

A sus propietarios –curiosamente no se les suele llamar aceituneros por muchos olivos que tengan- suelen vivir rodeados de obreros de la ciudad que aún no han comenzado a entablar contactos síndicos. Mucha memoria histórica que cada vez es más precisa sobre todo para que no olviden los obreros que hay una cosa que se llama sindicato.

Que cunda otro más ejemplo; a ver si algún avispado geógrafo universitario extremeño nos sorprende con datos históricos y ciertos del atraco autóctono de caminos, cauces, pozos, arroyos, senderos, cordeles y demás patrimonio común que ha ido limpiamente a las limpias manos. (¿Por qué se ponen las manos rojas cuando se roba algo?).

Los jornaleros procederán a recoger las aceitunas de los caminos para después destinarlas a un fin social; critico que lo mismo se adelantaba más recogiendo las fincas para fines sociales y que dejasen las aceitunas de los caminos para los señoritos… y señoritas. Pero me temo que esto no obra de ningún círculo obrero. Igual de estólitos semos.

”Pues los terratenientes tienen una serie de privilegios, acaparan todo el dinero de los fondos europeos y contratan a inmigrantes sin documentación, entre otras cosas”, ha dicho el Secretario General.

No hay que preocuparse, Google -que es nuestro nuevo dios de la veracidad- recogía el fruto informativo de este asunto en seis referencias de prensa y ocho artículos, la misma potencia informativa que ha merecido el descubrimiento de un nuevo insecto cavernícola por científicos españoles.

Goyo
09-ene-07

Lo tenemos ahora en Roma aunque aún no sea santo ni padre; es una persona con marcado acento normaloide, que peca de sonrisa acarcajada y de ansias continuas de encontrar ideas que andan sueltas, de escribir ideas que prediquen con facilidad en la amplitud humanista y de seguir perteneciendo a este colectivo idealista/ideólogo que se somete al paraguas protector de «lasideas»: César.

Se le ocurre al hombre -y también a las mujeres y a los hombres de «lasideas»- que la globosfera hispánica, la extremeña, la catalana, la vasca,… debe ayudar también a superar el bombardeo de la T-4 para hacer otra obra en blanco y negro que nos ayude a no caer en perseguir la Paz con el alfange, con la espada o con la catana.

Queremos los blogueros atizar los ánimos del sábado trece con la fuerza que puede construirse desde la distancia; allí estaremos ausentes gritando algunas veces, recordando otras o masticando el maldito silencio de ser pacíficos.

Allí estaremos izando parte de la paz, la parte que le corresponde al apoyo de las voluntades que nos declaramos a favor de la Paz y en contra de usar el Terror para convencer; la otra parte quizá comience también a valorar que su compromiso debe esclavizarse al sentimiento común.

Solo así después podremos empezar a hablar para aclararnos.

Goyo

08-ene-07