Entre las muchas cosas comunes que guardan y cultivan los partidos políticos más poderosos de este país, señalo como relevantes dos de ellas: los educados contactos para transmitir poder y el acuerdo de presentarse a las cumbres internacionales con asentimiento compartido. Después quizá se presenten los perjuicios de tan reverente protocolo; pues suele ocurrir que algún que otro cantatardes se invente el raca-raca de la “herencia recibida”, o escupa declaraciones que nos ponen más cuesta abajo cuando se regresa de la cumbre. Toda esta malicia política, es tratada minuciosamente, diseñada su estrategia de expansión y aplicados los programas de ingenería didáctica para que los simples de espíritu se vean contentados en sus dosis de venganza, desprecio o despecho. El caso es descontentar.
La primera de las cumbres, la europea, se celebrará el próximo 8 de diciembre, donde algunos son miedosos en prestar soberanía fiscal autóctona para crearla en común. Aquí, en esta Europa desfederada, envidiamos a Holanda o Dinamarca por su dinamismo de protección social mientras que sonreímos a nuestros autóctonos burladores de Hacienda.¿ Acordará la derecha, la izquierda y el tronco una política impositiva común ?. Esa es la duda que resolverá lo que nos suceda de inmediato, pero con consecuencias que afectarán a toda una generación desconexa.
De todo lo que produce la Unión Europea, tan sólo el 3% lo aporta Grecia, ¿Cómo es posible tanta alboroto por tan poca lata? ; pues porque los bancos saben meter ya más miedo que los jueces y aquí no estudia ni el estudiante.
Seguro que muchos de ustedes han estado bien atentos a la temática de persuasión electoral; habrán observado que la problemática ambiental ha sido relegada al cuarto de las tareas ocultas, masónicas o judaicas (ni siquiera nos han invitado a sumarnos al cambio climático).
Bien, la próxima cumbre -inmediata, extensa e ignorada- tratará sobre la tragedia medioambiental y se celebrará en Durban, allá en Sudáfrica, entre los días 28 de noviembre y 9 de diciembre, doce días para que los europeos mostremos pistas de los que va a ser nuestro futuro. Dudo mucho que estemos al loro.
Goyo
28-nov-11
Una banderita para toda cumbre
