Se va como poema de vieja,
enfermado de exilios y dolores.
Se acostó latente con la muerte al lado,
y a pesar del blanco de la tela sábana,
se llevó la novia las citas de musa.
Muerte hospitalaria,
princesa de espinas,
concédele a Mario,
-por fin- tu sonrisa.
Goyo
19-may-09