Poda en verde

 

Este señor -me refiero al señor Rajoy- dicen que anda ocupado él mismo y encargando a sus colaboradores el hallazgo feliz de la nueva terminología que calme tanto a mercaderes como a compradores. Y esta mañana, como aprendiendo las cosas que el campo enseña, he encontrado como una especie de remedio que deseo exponer por si le sirviese de ayuda al personal. Anticipo que la valía del método ya fue criticada por Bertrand Russell cuando afirmaba que una explicación de este tipo, una analogía,  lo mismo sirve para explicar todo que no explica nada.

Pues yo estaba lo que se dice podando en verde mi pequeño viñedo dispuesto en espaldera. En esta época, hay pámpanos que crecen malamente, roban nutrientes a los racimos infantiles e impiden después colocar las redes que preservarán las uvas de los pájaros. En la primera foto se aprecia cómo se desarrollan con desmesura algunas partes de la cepa; para el buen equilibrio de toda la planta, dicen que conviene recortar lo que sobresale para que el resto, y el fruto esencialmente, alcancen el desarrollo previsto.

Pues algo así puede utilizar ahora el populismo para convencer a la mediocre clase media de las bondades de los recortes: los brazos más salientes de la planta eran los hiperdesarrollados pámpanos sanitarios y educativos. Ajustándolos al tamaño recortado, no hacemos otra cosa que sostener sin eliminar y, a la vez, permitir que los frutos entren en sazón y engorden. O sea, que en realidad lo que hacemos es revitalizar la viña, darle un aire nuevo y ordenado, corregir los excesos y organizar que no vivan por encima de sus posibilidades. ¿ Comprenden ?

 

 

Supongo que no hará falta explicarles para quién serán los frutos, y que deben entretenerse buenamente con los juegos semánticos que permiten las palabras en negrita.

Para todo lo demás, ustedes mismos aprenden y saben.

Goyo

12-jun-12

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